El jefe de la Misión de Verificación de la ONU en Colombia, Carlos Ruiz Massieu, aseguró ante el Consejo de Seguridad de ese organismo que la implementación de la paz avanza en el país, pero resaltó con preocupación el impacto de la violencia en comunidades vulnerables.
«Escuchamos una súplica desesperada de ayuda. Transmitimos nuestro apoyo a los afectados así como la urgencia de que las autoridades tomen medidas para mejorar la situación. También llamamos a los grupos armados, una vez más, a que cesen inmediatamente la violencia y respeten el derecho internacional humanitario», dijo Ruiz Massieu en la presentación del último informe sobre la implementación del Acuerdo de Paz.
Mencionó en su intervención al departamento de Arauca como un ejemplo de la violencia que se viven en distintas parte del país: «Regiones desatendidas frente a grupos armados ilegales, economías ilícitas y una presencia limitada del Estado».
Pero también hizo un llamado a que se investigue la operación militar que se realizó en Puerto Leguizamo (Putumayo), donde murieron 11 personas, entre ellas (según investigaciones periodísticas y de ONG) varios civiles.
«El departamento de Putumayo se ha visto igualmente afectado por la violencia en las últimas semanas. Hago hincapié en el importancia de unainvestigación exhaustiva por parte de las autoridades competentes sobre las muertes denunciadas de once personas, incluyendo líderes indígenas y comunitarios, en el contexto de una operación militar contra miembros de un grupo armado ilegal en Puerto Leguizamo».
Carlos Ruiz reconoció avances en la implementación bajo el Gobierno del presidente Iván Duque, pero dijo que «el reconocimiento de lo ya se ha avanzado no significa minimizar retos y riesgos que aún amenazan la consolidación de paz en el país».
Finalmente, el jefe de la Misión de la ONU, dijo que el proceso electoral en Colombia está dividiendo la paz, aunque destacó que «la democracia colombiana se verá enriquecida por el aumento de la voz de las víctimas en el congreso. Confío en que el nuevo Congreso trabajará en asuntos pendientes de agenda legislativa del Acuerdo».
Preocupación del Consejo
El representante de Reino Unido, Tariq Ahmad, destacó como histórico que en las últimas elecciones legislativas en Colombia, se haya elegido a 16 víctimas para curules de paz especiales, y lo consideró como «una oportunidad para ampliar la participación democrática con las víctimas y las comunidades mas afectadas por el conflicto”.
Sin embargo, lamentó la muerte del líder ambientalista Jorge Santofimion en Putumayo, en febrero pasado, y se dijo «alarmado» por las muertes de lideres sociales y miembros de comunidades indígenas y afrocolombianas».
Los representantes de Kenia, Ghana y Gabón hicieron una declaración conjunta en la que destacaron las curules de paz, y pidieron a Colombia cumplir con la integralidad del Acuerdo, y la protección de los firmantes de paz.
Albania, Brasil, Estados Unidos, México, entre otros que también intervinieron en el Consejo, insistieron en más protección a la sociedad civiles y comunidades indígenas y afrocolombiana. Pidieron más esfuerzos contra el narcotráfico y la violencia urbana.
Casi a una voz, todos los representantes destacaron la importancia de que el próximo presidente de Colombia, el tercero desde que se firmó el Acuerdo, se compromete con la implementación integral de lo pactado.
Las críticas de Rusia
En esta ocasión, el embajador de Rusia, Vasili Nebenzia, muy criticado por sus intervenciones en la ONU sobre la guerra en Ucrania, solo consideró fallas que cree que ha cometido el Gobierno de Colombia en la implementación de la paz.
Nebenzi se dijo «inquieto porque Colombia ha conseguido hitos en la implementación, pero hay problemas de ejecución del Acuerdo».
Concretamente, dijo que el Gobierno «sistemáticamente ha evitado mencionar el ‘Acuerdo definitivo de paz’ y en cambio, ha hablado del ‘programa de paz basado en legalidad’, que no fue aprobado por el Consejo de Seguridad» de la ONU.
El embajador dijo que esto es muestra de que «una verdadera reconciliación en el país no se ha conseguido» y que las conclusiones del último informe de la Misión de la ONU, que confirma el asesinato de 315 excombatientes desde la firma del Acuerdo, muestran que «el Gobierno no es capaz de velar por la seguridad física de participantes del acuerdo. Hay vacíos en la autoridad del estado en zonas rurales. Hay fracasos importantes».
Sin embargo, lamentó la muerte del líder ambientalista Jorge Santofimion en Putumayo, en febrero pasado, y se dijo «alarmado» por las muertes de lideres sociales y miembros de comunidades indígenas y afrocolombianas».
Los representantes de Kenia, Ghana y Gabón hicieron una declaración conjunta en la que destacaron las curules de paz, y pidieron a Colombia cumplir con la integralidad del Acuerdo, y la protección de los firmantes de paz.
Albania, Brasil, Estados Unidos, México, entre otros que también intervinieron en el Consejo, insistieron en más protección a la sociedad civiles y comunidades indígenas y afrocolombiana. Pidieron más esfuerzos contra el narcotráfico y la violencia urbana.
Casi a una voz, todos los representantes destacaron la importancia de que el próximo presidente de Colombia, el tercero desde que se firmó el Acuerdo, se compromete con la implementación integral de lo pactado.
Vía Rcn radio