La Policía Nacional informó este viernes la captura de Brian Donaciano Olguín, presunto cabecilla del Cartel de Sinaloa que en su último viaje al país aterrizó en el aeropuerto José María Córdova, de Rionegro.
De allí viajó a Cali, ciudad en la que luego de seguimientos a su novia, fue detenido por la Dirección Antinarcóticos y un equipo especializado de la Administración de Control de Drogas (DEA). Esta agencia estadounidense lo señala de ser mano derecha en Colombia del narcotraficante mexicano Joaquín Guzmán Loera, el Chapo Guzmán, a través de alias “Mayo Zambada”.
La labor que a Donaciano le encomendaron en el país fue la de supuestamente coordinar reuniones con disidentes de las Farc, principalmente con las estructuras de “Iván Mordisco” y “Gentil Duarte”. El objetivo de los encuentros sería pactar el envío de cargamentos de droga al exterior.
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Frente a ello, desde Barranquilla, el director de la Policía, general Jorge Luis Vargas, anunció que Donaciano se hacía llamar alias Pitt, y su prontuario lo muestra como uno de los enlaces más importantes entre el Cartel de Sinaloa y las disidencias del sur del país, como la Dagoberto Ramos y la Carlos Patiño.
La captura en Cali
Las autoridades sabían que este mexicano había entrado al menos tres veces a Colombia, y aprovecharon su última visita, el pasado 17 de febrero, para llegar a él con la información ya recaudada sobre su pareja sentimental.
Fue así como se dieron cuenta –con ayuda de cámaras de seguridad– que viajaron en carro desde Rionegro a Cali, y que una vez llegaron a esa ciudad se fueron a vivir a un condominio ubicado en un exclusivo sector llamado Ciudad Jardín, del cual salía por cortos periodos de tiempo para no levantar sospecha.
Incluso, de acuerdo a la Policía, para capturarlo, los agentes tuvieron que vulnerar los anillos de seguridad que ponía el supuesto emisario para estar atento a cualquier operativo en su contra.
Tanto así que el día del operativo, cuando el primer uniformado se acercó a la portería, alias Pitt llamó al vigilante y le preguntó qué pasaba. “Ante tal indagación, le indicaron que se trataba de unas visitas de rutina”, resalta la Policía.
No alcanzaron a colgar el citófono cuando Donaciano ya tenía en la puerta de su casa a los otros agentes que iban por él, quienes lo capturaron y le comunicaron el pedido en extradición que tiene el Tribunal del Distrito Sur de California (Estados Unidos) por conspiración para importar cocaína.
Tomado de El Colombiano