Santiago Buitrago logró su revancha en Lavarone, el ciclista bogotano convirtió las lágrimas de impotencia del pasado domingo en lágrimas de alegría y euforia este martes, luego de coronar la fuga y quedarse con el triunfo en la etapa 17 del Giro de Italia.
Buitrago integró la fuga desde el principio de la jornada, en una etapa exigente compuesta por tres puertos de montaña de primera categoría.
El ciclista del Bahrain Victorius se fue al piso a falta de 80 kilómetros, soltándose del grupo de fuga y reponiéndose con altura, reconectando con el grupo instantes más tarde.
Los neerlandeses Matheu Van Der Poel y Gijs Leemreize eran el gran obstáculo, con quienes enlazaron al concluir el ascenso al Passo del Vetriolo, pero quienes tomaron nuevamente una distancia importante en este descenso.
El bogotano de 22 años se decidió entonces, a un poco menos de 12 kilómetros lanzó un ataque valiente para empezar a recortar más 1’30» de diferencia con los dos hombres en el frente de la carrera, faltando 10 superó a Van Der Poel, a 8.5 a Leemreize y ahí comenzó su marcha en solitario.
En meta tuvo tiempo para echar una mirada a su alrededor, levantar los brazos y festejar emocionado, con diferencia de 35″ sobre Gijs Leemreize y de 2’28» sobre el checo Jan Hirt.
El ciclista bogotano figura ahora en el puesto 14 de la general a 20’15» del primer puesto.
La lucha por la maglia rosa mantuvo la pelea al vilo entre el ecuatoriano Richard Carapaz y el australiano Jai Hindley, con solo 3″ de diferencia entre ambos. El español Mikel Landa ascendió a la tercera posición a 1’05» y Joao Almeida cayó al cuarto lugar a 1’54».