El Tribunal Administrativo de Barranquilla ordenó retirar la placa del inaugurado Túnel de la Línea, donde figuran los nombres del presidente Iván Duque y de la vicepresidenta, Martha Lucía Ramírez, luego de que María Gutiérrez, una barranquillera de 23 años, entablara una demanda en contra de este acto.
La placa del túnel de la línea se va.
Acá les cuento lo que hicimos desde el Instituto de Pensamiento Liberal para lograr este fin. pic.twitter.com/FyQGhuS8Bs— Marla Gutiérrez (@marlagutierreza) November 21, 2020
En septiembre pasado, una vez se dio al servicio la obra, la abogada Gutiérrez elevó una solicitud al ente judicial para que se quitara dicha placa, apelando al inciso 2° del decreto 2759 de 1997, que prohíbe “la colocación de placas o leyendas o la erección de monumentos destinados a recordar la participación de los funcionarios en ejercicio, en la construcción de obras públicas, a menos que así lo disponga una ley del Congreso”.
El decreto ordena además que tampoco se pueden designar con el nombre de personas vivas ni los bienes públicos ni los “sitios u obras pertenecientes a la nación, los departamentos, distritos, municipios o a entidades oficiales o semioficiales”.
Además, advierte que los ministerios, gobernadores y alcaldes deben velar porque esto se cumpla y solo pueden designar el nombre de personas vivas a dichos bienes si la comunidad lo pide y se trata de alguien que “haya prestado servicios a la nación que ameriten tal designación”.
A través de su cuenta en Twitter, Gutiérrez explicó que inicialmente le había elevado una petición formal a la Presidencia de la República, la Gobernación del Tolima y el Ministerio de Transporte, con el fin de que la placa fuera retirada, que no fue escuchada.
En vista de la falta de respuestas, la joven promovió una acción de cumplimiento ante el Tribunal, el cual falló a su favor, y dio un plazo de 30 días para que el presidente Iván Duque retire la placa.
“Nosotros tenemos varias acciones similares a esta. Pensamos que este es un tema muy pertinente no solamente por el simbolismo que representa esta placa enorme, que es un desacato a la ley, sino que es una obra que lleva más de 100 años pensándose y planeándose en mente de miles de personas que participaron ahí y me parece un poco injusto que simplemente se recuerde el ultimo”, señaló.
Pero advirtió que en efecto, “esta no es la única placa del país que tiene los nombres de los funcionarios que la inauguraron…En el país claramente hay muchas placas, pero creo que esa es la placa más grande que se ha instalado en una obra, que es de dimensiones enormes y nosotros desde el instituto de pensamiento liberal tenemos esta área que se encarga del litigio estratégico y nuestra labor es sentar un precedente para que más ciudadanos puedan replicar este litigio en sus departamentos o municipios”.
Respecto a la impugnación que presentó la Presidencia de la República ante el Tribunal, Gutiérrez indicó que “a ellos (la Presidencia) los desvincularon del proceso porque el Tribunal dice que el Presidente es el superior jerárquico del Ministerio de Transporte entonces el Presidente está obligado también a cumplir la ley y a hacer que todas sus entidades cumplan la ley. Invías también impugnó la decisión diciendo que no era esa placa, sino que hay otra placa, pero claramente está especificado cuál placa es: la que tiene el nombre de Iván Duque. Vamos a esperar que dice el Consejo de Estado, pero de todas formas este fallo proferido en primera instancia ya es un precedente judicial muy importante, no por el tema de la placa en sí, sino que se demostró que este recurso en específico, que es la acción de cumplimiento, se puede utilizar para obligar que un tribunal le ordené a un presidente de la República acatar un decreto o una norma”.
El Consejo de Estado tiene 10 días a partir de la fecha de la notificación de la impugnación para proferir un fallo en derecho sobre este tema.
Una placa gigantesca para una obra a medias
Como corolario de esta historia hay que decir que el Túnel de la Línea que terminó costándole al Estado colombiano, 2,9 billones de pesos, no está terminado en su totalidad.
El proyecto completo Cruce de la Cordillera Central, del que hace parte el túnel de La Línea, consiste en la conexión en doble calzada desde Cajamarca (Tolima) hasta Calarcá (Quindio) de 30 km. Además de ello, las obras que la comprenden son: 25 túneles (entre los que está incluido el de La Línea), 31 viaductos y 3 intercambiadores viales.
En septiembre de 2020 el Gobierno puso en marcha un total de 5 túneles, 5 viaductos, 2 intercambiadores viales y 13,4 km de vía nueva que conforman una parte de la doble calzada que conecta los municipios de Cajamarca (Tolima) y Calarcá (Quindío).
En abril de 2021, se pondrá en servicio la totalidad del Cruce de la Cordillera Central.
A la fecha el ingreso a la obra solo se da en un solo sentido: Armenia-Bogotá (Calarcá-Cajamarca). El sentido Bogotá-Armenia se hace por la carretera antigua.
Adicionalmente, desde que se inauguró con la gigantesca placa, ha sido cerrado en varias ocasiones.
A menos de una semana de inaugurado se programaron cierres del túnel según el Instituto Nacional de Vías, para hacer seguimiento y pruebas al sistema eléctrico y de iuminación.
Posteriormente, los días 20 y 21 de octubre el túnel fue cerrado nuevamente en horas de la noche con el objetivo de desarrollar labores de revisión periódica en los sistemas de operación. Estos son necesarios para garantizar la movilidad segura a través de la megaobra de infraestructura, señaló el Invias.
Y desde el 26 de octubre el túnel permanece cerrado en horas nocturnas hasta el 11 de diciembre según confirmó el Instituto para poder adelantar trabajos en el corredor vial entre Calarcá, Quindío y Cajamarca.
Este cierre, que se extenderá hasta el 11 de diciembre, se cumplirá entre las 11:00 p. m., y las 5:00 a. m. del día siguiente, culminando los viernes a las 5 a. m. El cierre no aplicará los días sábados, domingos ni festivos.
El propósito del cierre es realizar obras que permitan estabilizar el talud de Bellavista, ubicado en el kilómetro 38+900, aledaño al sector donde el Instituto Nacional de Vías (Invias) ya había removido 19.000 metros cúbicos de material hace unos meses, lo que permitió la estabilización de tres taludes en el sector Cinabrio en el Tolima.
Estos trabajos no se realizan en el túnel de La Línea, pero “por ser esta una zona cercana al túnel, el cierre se lleva a cabo desde el peaje Américas, porque no puede permitirse el represamiento de vehículos en el interior de esa estructura. Debido a que el suministro de concreto proviene de Cajamarca y el material que debe evacuarse también se deposita en la misma dirección, se requiere un corredor libre para que fluya ese material”, indicó Invias en su momento.
Es decir que lo único que ha funcionado bien sin cierres y bien puesta es la placa el tan cacareado Túnel, que después de inaugurado ha permanecido cerrado para transitar en horas nocturnas.