La decisión de Álvaro Uribe de no aspirar al Senado en 2022 dejará un hueco de más de 800 mil votos, que tendrá que ser llenado por grandes electores en distintas regiones del país, si el partido de gobierno pretende no perder representación en el Congreso.
En Antioquia, por ejemplo, han pensado en el nombre del excandidato a la Gobernación, Andrés Guerra, que obtuvo más de 650 mil votos en las últimas elecciones y en Cesar, en el nombre de la excandidata a la Gobernación, Claudia Margarita Zuleta, que obtuvo casi 100 mil votos.
En Bogotá la situación es particularmente complicada. En 2018, Uribe logró 200 mil votos, mientras que la siguiente votación en el Senado fue la de María Fernanda Cabal, quien obtuvo cerca de 12 mil votos. Para llenar ese vacío en 2022 todos los dedos apuntan a una persona: el excandidato a la Alcaldía, Miguel Uribe Turbay.
El expresidente Uribe invitó formalmente a Uribe Turbay a hacer parte de la lista de su partido al Senado y que esa llegada está a punto de concretarse. Es más, nos cuentan que el ex secretario de gobierno de Bogotá es uno de los más fuertes candidatos para remplazar a Álvaro Uribe como cabeza de lista del partido de gobierno.
Uribe Turbay fue aceptado a un programa de políticas públicas en la Universidad de Harvard que empezará en pocos meses; sin embargo, ese proyecto académico no es incompatible con la campaña política.