Se acabó el sueño del Junior de Barranquilla en sus 100 años, pues el gran objetivo era la Copa Libertadores, competencia en la que hicieron una fase de grupos para enmarcar, sin embargo, los octavos de final fueron una cachetada para el cuadro ‘tiburón’ y perdieron tanto en Chile como en Colombia.
En la ida, el cuadro chileno había ganado 1-0 con un gol de Vicente Pizarro en los minutos finales del encuentro, en la vuelta, el cuadro colombiano tenía la ilusión de hacerse fuerte en el Metropolitano y con el apoyo de la afición esperaba dar vuelta al resultado.
Aunque Junior se mostraba mucho más peligroso en la ofensiva, fue Colo-Colo quien abrió el marcador tras un impresionante misil de Cepeda, que desde casi 30 metros de distancia, batió al guardameta uruguayo Santiago Mele.
Aunque en los primeros 40 minutos, Junior no logró encontrar el gol, tras recibir el tanto del cuadro chileno, la reacción llegó casi instantáneamente, tras un gran pase de Didier Moreno, Carlos Bacca puso la igualdad en el marcador y despertaba la esperanza en la afición.
Con el marcador 1-1, ambos equipos se irían al descanso, pero Junior mostraba una cara mucho más confiada y con la tranquilidad de que el objetivo seguía estando al alcance de las posibilidades.
Con el arranque del segundo tiempo, llegaría un sistema de juego mucho más definido para cada equipo, en primer lugar, el cuadro colombiano jugaba muy cerca del área de su rival, mientras que el conjunto chileno se replegaba más en defensa y aprovechaba los laterales para crear salidas rápidas.
Aunque el encuentro se definía en un ida y vuelta constante, Junior generaba las mejores opciones, pero la falta de puntería evitaba que esas opciones sumaran en el marcador, caso contrario sucedió con Colo-Colo, que llegó pocas veces y fue bastante efectivo.
El gol que sentenciaría el resultado llegó tras un cabezazo de Maximiliano Falcón al minuto 74, en un tiro de esquina que llegaría tras una espectacular atajada de Mele, que parecía estar destinada a culminar con un final diferente, pues tan solo evitaría el tanto por unos segundos.
Tras el segundo tanto de los visitantes, Junior se salió del partido y comenzó a jugar con la ‘cabeza caliente’, no pasaron ni 5 minutos y el jugador Rafael Pérez vio la tarjeta roja tras una agresión a un jugador rival.
Para completar la historia, Arturo Vidal ingresaba al terreno de juego en un momento candente, no solo por los jugadores sino por la afición local, que le dedicaba cánticos y silbatinas al histórico jugador chileno.
Aunque se jugaron 15 minutos más después de la expulsión del jugador ‘tiburón’, el flujo de las jugadas dejó de existir y Junior no encontró manera de anotar un gol que lo volviera a meter en el partido.
El pitazo final del árbitro desencadenó la frustración de los jugadores del cuadro barranquillero, mientras que la felicidad en el rostro de los jugadores del ‘cacique’ era evidente y comenzaron a festejar con los suyos.
Colo-Colo ahora espera rival en la llave entre River Plate y Talleres de Córdoba, se enfrentarán en los cuartos de final de la Copa Libertadores a partir del 17 de septiembre.