JULIO ELÍAS VIDAL, LA CONTINUIDAD DE UNA POLÍTICA CORRUPTA

Bien dice el dicho que, “hierba mala no muere”, cuando se habla de los ‘Ñoños’, pareciera que dicho refrán lo hubiesen hecho en exclusiva para esta polémica familia política de Córdoba que hoy se niega a extinguirse.

Julio Alberto Elías Vidal, hermano del corrupto exsenador Bernardo ‘Ñoño’ Elías, quien además ha sido condenado, hoy recibe el beneplácito del Partido de la U para aspirar al senado de la república en las próximas elecciones parlamentarias. Esto sin duda sería un salvavidas para las artimañas corruptas de una política perversa que afectó a Córdoba y Colombia, las cuales fueron encabezadas por Bernardo ‘Ñoño’ Elías, y que hoy se encarnan en el insípido Julio Alberto Elías Vidal.

Está más que claro que Bernardo ‘Ñoño’ Elías, sería la sombra política de su hermano Julio Alberto Elías Vidal, es decir, el mismo ‘Ñoño’ ocupando de nuevo una curul en cuerpo ajeno. Así se está gestando una oportunidad imperdible para que la malévola política de los ‘Ñoños’ salga de nuevo al ruedo y tenga continuidad, pretendiendo perpetuar las jugadas sucias de un clan corrupto en todo el país.

Bernardo ‘Ñoño’ Elías, pudo presumir su amistad con el expresidente Juan Manuel Santos, también pavonearse alardeando de ser unos de los autores de la victoria presidencial de Santos. Bernardo Elías sin duda era un cacique político en Córdoba, pero que claramente se valía de una vida de jugarretas ilícitas para llegar a ello. Otro dato y no menos importante es el millonario dinero que recibía a través de los llamados cupos indicativos. Ñoño también tuvo su liga de futbol, que llevaba el nombre de ‘Ñoñomanía’.

De Julio Alberto Elías Vidal, no podemos decir gran cosa en materia política, siempre ha estado subyugado a las órdenes de su hermano. Tuvo una aspiración a la cámara por el partido de la U, la cual no alcanzó los votos para ganar una curul. Julio Elías Vidal fue fórmula de Joche Tous, otro parásito político de córdoba y lacayo del Ñoño; pero ambos terminaron ahogados en su perversa obsesión de poder.

Cabe resaltar que a Julio Elías Vidal se le pudo ver la cara en el Congreso de la República, gracias al embarazo de la representante Sara Piedrahita. Acontecimiento épico pero bochornoso, que después de gastar tantos miles de millones en una campaña dependieran de los deseos de tener bebé de la representante Piedrahita y así, Elías Vidal, hiciera la licencia de maternidad en el congreso.

Con un panorama despejado donde queda al descubierto que la aspiración de Julio Elías Vidal al senado no tiene ningún fundamento político o social, pero, sí la sed de perpetuar una política corrupta, y la prepotencia de pasar sobre o personas que de verdad puedan tener los méritos suficientes para aspirar o alcanzar una curul en el congreso de la república.

Los delitos de concierto para delinquir agravado en concurso heterogéneo con el ilícito de lavado de activos, cohecho y tráfico de influencias, hechos por el Ñoño Elías, se niegan a desaparecer del congreso, y hoy pretenden perpetuarse a través de la aspiración del cascarón político Julio Elías Vidal.

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