El Gobierno Nacional tiene en marcha una serie de acciones para mejorar la vivienda rural en Colombia y superar años de atraso que afecta la condición de vida de los campesinos del país.
El Viceministro de Vivienda, Carlos Alberto Ruíz Martínez, presentó un balance de la situación de la vivienda de los campesinos en el país, reconoció que hay un alto déficit en la calidad de la misma y enumeró los frentes de trabajo que están en marcha.
Explicó que, aunque hoy en las ciudades viven, en promedio, 4 personas más que en los campos, las necesidades habitacionales son del mismo tamaño.
Es decir, el déficit de habitaciones en la ruralidad es mucho más grande que las necesidades que hay en lo urbano y las condiciones logísticas de acceso son más complejas, por lo que la vivienda rural se vuelve en un gran desafío de Estado para llegar con soluciones habitacionales a las familias de más bajos ingresos en zonas más apartadas, anotó el Viceministro Ruíz Martínez.
Precisó que, en lo cuantitativo, el número es relativamente bajo, porque el problema es más cualitativo, ya que las actuales en alto porcentaje son viviendas de baja calidad, con precarios servicios, por lo que se puede afirmar que seis a siete personas de cada diez en el campo, tienen déficit habitacional.
Enumeró los cuatro frentes de trabajo que tiene en marcha el Gobierno con su Política de Vivienda Rural y que incluye un Programa de Vivienda Social para el Campo, para lo cual están abiertas las convocatorias para constructores en 17 departamentos.
También se está atendiendo a la población étnica con soluciones de vivienda, hay muchos avances en la atención de vivienda rural a reincorporados y es fundamental para el Gobierno atender las necesidades habitacionales de las personas víctimas del conflicto armando.