Se conocieron tres cartas que recientemente la Defensoría del Pueblo envió a la OEA, a la CIDH y a varios abogados, donde alerta sobre la posibilidad de que los colombianos detenidos en Haití sean asesinados por un grupo armado que ha intentado tomarse la cárcel donde se encuentran, por lo menos, en tres ocasiones.
En las cartas, la Defensoría pide medidas cautelares debido a que los exmilitares acusados del magnicidio del presidente Jovenel Moise han sido torturados mientras son interrogados sin ningún tipo de asistencia legal.
Los tres documentos están fechados del pasado 16 de septiembre y están firmados por el titular de ese órgano, Carlos Camargo.
En la primera carta, cuyo destinatario es el secretario general de la OEA, Luis Almagro, se solicita que se garantice la atención legal a los implicados, así como a las denuncias de torturas y tratos crueles en Haití.
“La situación de seguridad de estas personas es cada vez más compleja, dado que grupos armados irregulares han manifestado su intención de tomarse la cárcel, y así lo han intentado en las últimas semanas», resaltado en el documento.
En otra de las cartas, enviada a la presidenta de la CIDH, Antonia Urrejola, la Defensoría amplía la denuncia sobre la existencia de un comando armado que quiere entrar a la penitenciaría donde están recluidos los colombianos para asesinarlos, por lo que pide medidas cautelares.
La tercera misiva, que va dirigida al titular de la Organización de Abogados Sin Fronteras regional de Haití, plantea la posibilidad de que un abogado de esa organización pueda prestarles ayuda jurídica a los colombianos, puesto que, hasta el momento, han sido interrogados sin el derecho a la defensa.