A tres semanas del congreso del Partido Comunista, la justicia del régimen sentenció a pena de muerte a Fu Zhenghua por aceptar sobornos, aunque su condena será conmutada a perpetua tras una prórroga de dos años
Un ex ministro de Justicia de China fue sentenciado a la pena de muerte con una prórroga de dos años por aceptar sobornos y ayudar a delincuentes, incluyendo su hermano, a ocultar actividades ilícitas, reportó la televisora estatal el jueves.
Las condenas a muerte con prórroga suelen intercambiarse por penas de prisión perpetuas si se considera que el condenado se ha reformado, pero sin posibilidad de libertad condicional.
La sentencia a Fu Zhenghua se suma a las emitidas contra otros altos cargos que fueron castigados por corrupción dentro de la larga represión que comenzó tras la llegada del presidente, Xi Jinping, al poder a finales de 2012, y se produce apenas tres semanas antes de una reunión política clave en la que se espera que el presidente Xi Jinping consiga un tercer mandato sin precedentes.
Fu, de 67 años, se declaró culpable de abusar de su poder como ministro o jefe de policía de la capital, Beijing, entre 2005 y 2021 para ocultar delitos cometidos por su hermano y otras personas, dijo China Central Television en su web.
A cambio, Fu recibió dinero y propiedades por valor de 117 millones de yuanes (16,5 millones de dólares), informó el diario oficial China Daily en julio. El reporte del jueves y noticias previas no ofrecieron detalles de los cargos que se imputaban al hermano de Fu, Fu Weihua.
Fu Zhenghua, entonces jefe policial en Beijing (Reuters/archivo)
El tribunal dijo que el ex político “(está) privado de sus derechos políticos de por vida y todos sus bienes personales deben ser confiscados”.
Se cree que, durante su mandato como máximo responsable de la policía de Beijing, Fu dirigió la investigación sobre la corrupción de Zhou Yongkang, el antiguo jefe de seguridad que fue encarcelado en 2015 en uno de los casos más destacados de la campaña contra la corrupción.
Fu fue miembro de la Comisión Central de Asuntos Políticos y Jurídicos y ministro de Justicia antes de entrar en semiretiro en mayo de 2020.
Estaba desempeñando el cargo de subdirector de la comisión de asuntos sociales y jurídicos del comité permanente de la Conferencia Consultiva Política del Pueblo Chino (CCPPCh) -un órgano consultivo en gran medida ceremonial- cuando las autoridades anticorrupción iniciaron una investigación sobre sus gestiones el pasado octubre.
Más de un millón de funcionarios han sido castigados en el marco de la campaña anticorrupción, que según los críticos también ha servido para eliminar a los enemigos políticos de Xi desde que llegó al poder en 2013.
El líder chino ha acelerado el ritmo de la campaña anticorrupción de cara al congreso del partido de mediados de octubre.
Xi Jinping en el Congreso en 2018 (Reuters)
Tres ex jefes de policía, todos ellos acusados de soborno, recibieron el miércoles duras condenas por corrupción. Gong Daoan, ex jefe de policía de Shanghai; Deng Huilin, ex jefe de policía de Chongqing; y Liu Xinyun, ex jefe de policía de la provincia de Shanxi, rica en carbón, fueron condenados en distintos tribunales de la provincia de Hebei.
Gong, ex teniente de alcalde y director de la Oficina de Seguridad Pública de Shanghai, fue condenado a cadena perpetua por aceptar sobornos por valor de 73,43 millones de yuanes (10,4 millones de dólares), informó la cadena estatal CCTV.
Deng, ex director de la Oficina de Seguridad Pública de Chongqing, fue encarcelado durante 15 años por aceptar 42,67 millones de yuanes (6 millones de dólares) en sobornos, según la CCTV.
Liu, ex policía de alto rango en Shanxi, fue encarcelado durante 14 años por aceptar sobornos por valor de 13,33 millones (1,9 millones de dólares), informó la CCTV.
(Con información de AFP y AP)