Todo un recorrido de dolor vivió la familia de la señora Ofelia Córdoba, sospechosa de la Covid-19, al buscar atención para su salud luego de que se complicara en su residencia, en Cereté el pasado 3 de julio y de este municipio fuera trasladada Hospital San Jerónimo de Montería, donde no fue aceptada.
Los hijos de Ofelia vivieron así una peripecia en el recorrido de la ambulancia para que su madre fuera atendida. Del San Jerónimo la enviaron al Hospital de Campaña Miguel ‘Happy’ Lora, donde tampoco fue recibida.
Los familiares, al ver que el delicado estado de salud de la señora se complicada con el transcurrir de los minutos, se dirigieron a la Clínica IMAT con la intención de gestionar su tratamiento a través de su EPS, Comparta, pero al no existir convenio entre ambas entidades, la única posibilidad de atención era la particular.
“Me tocó consignarle $10 millones para que pudieran atender a mi mamá, ella falleció e 20 de julio y en la Clínica IMAT no nos han entregado el cuerpo de mi mamá porque les debo $50 millones y yo tengo un pagaré firmado”, relata con impotencia uno de los hijos de Ofelia.
El hijo cuenta que el diagnóstico de deceso de su madre fue por la Covid-19 y, además de exigir el pago de los $50 millones, la IMAT está descontando la atención del seguro de la fallecida desde el día de su ingreso.
Una amenaza de golpear las instalaciones de la clínica con una varilla fue lo único que hizo que la IMAT entregara el cuerpo de Ofelia a sus familiares, que llevaban días de angustia, dolor y preocupación.
Los familiares exigen que la IMAT reembolse el dinero consignado para su ingreso, ya que han seguido descontando del seguro de la fallecida.
Tomado de gsnoticias