El alcalde de Medellín, Daniel Quintero, quiere ser presidente en 2026. Y su equipo político está encarando las elecciones regionales como una antesala presidencial. El objetivo es construir una estructura territorial que le permita competir en lo nacional. Pero revalidar la Alcaldía parece, al inicio oficial de la campaña, una verdadera proeza. Su principal candidato, Juan Carlos Upegui, arrastra con los récords de impopularidad de la administración y persigue de lejos a Federico Gutiérrez, el indiscutible favorito.
El quinterismo, sin embargo, le está apostando a tener una bancada fuerte en el Concejo de Medellín. No lo hace únicamente con sus candidatos en Independientes, el partido del alcalde. También lo hace con sus aliados en otros partidos. “Hay afinidades. Yo, desde Independientes, quiero llegar a los espacios de toma de decisiones. Pero también quiero apoyar y acompañar a los ejercicios políticos parecidos a los nuestros”, dice la exsecretaria Ana María Valle, cabeza de lista de Independientes.
Con esto, buscan tener una bancada multicolor que les garantice una voz fuerte en la ciudad, estirando los límites de la coherencia ideológica y el sello de movimiento alternativo de Independientes. Lo hacen, además, bajo las tácticas de Quintero, un político pragmático que combina las tácticas de la política tradicional, saltando de partido en partido, y la habilidad para influir como líder de opinión.
El quinterismo de todos los colores
Por fuera de Independientes, la concejala Lina García es una de las candidatas más fuertes del quinterismo. García encabeza la lista de Medellín Nos Une, el movimiento del exconcejal Albert Corredor, quien después de Upegui es el candidato a la Alcaldía más cercano a la administración.
García busca repetir curul. En 2019, fue elegida por el Centro Democrático. Hizo parte de la rebelión de concejales uribistas que se negaron a hacerle oposición a Quintero. Esto provocó la suspensión temporal de su derecho al voto, una decisión finalmente revocada, y su posterior renuncia al partido.
Desde entonces, García ha sido una de las caras más visibles de la coalición quinterista en el Concejo. Y ahora es la principal carta de la lista al Concejo de Corredor, un candidato que ha tenido a su disposición la burocracia de la Secretaría de Educación para recoger las firmas de su campaña, como lo revelaron La Silla y El Colombiano. De hecho, la exsecretaria Alexandra Agudelo, imputada por la Fiscalía en medio del escándalo de Buen comienzo, era reconocida como cuota del grupo político de Corredor, quien es hijo de un poderoso empresario del sector educativo.
Otro de los candidatos aliados del quinterismo es el politólogo Mateo Jiménez, conocido como “Dinamita”. Jiménez está compitiendo por la lista de la ASI. Es el candidato del grupo político del excongresista liberal Iván Agudelo, amigo personal de Quintero —es el padrino de una de sus hijas—. Jiménez ha construido su carrera política desde el sector cultural. En los últimos años ha trabajado de contratista en la administración como asesor cultural. Ha dirigido festivales organizados por la Alcaldía e hizo parte del comité organizador de la Feria de las Flores.
En paralelo, el grupo político de Agudelo está impulsando la candidatura del exsubsecretario Juan Daniel Pulgarín, una de las cartas fuertes de Independientes para la Asamblea de Antioquia. La Silla lo pudo comprobar con una fuente del equipo de Agudelo que participó en el acuerdo. Antes de aspirar a la Asamblea, Pulgarín participó en el proceso interno de Independientes para elegir candidato oficial a la Alcaldía, que finalmente ganó Upegui.
Esto se suma al apoyo que aliados del equipo de Agudelo le están dando a Esteban Restrepo, candidato de Independientes a la Gobernación de Antioquia. De hecho, Jiménez, avalado por la ASI, no está apoyando al candidato oficial de su partido, el exgobernador Luis Pérez. “Por disciplina de partido debemos apoyarlo. Pero, la verdad, no hemos tomado ninguna decisión ni para Alcaldía ni para Gobernación”, dice.
El tercer candidato al Concejo por fuera de sus toldas, pero alineado con el quinterismo, es el exsecretario Alejandro Arias, quien está compitiendo por la lista del partido Verde. Arias fue secretario de Desarrollo Económico desde enero del 2020 hasta octubre del 2022, convirtiéndose en uno de los altos funcionarios más estables dentro del cambiante gabinete de Quintero. Además, lideró la construcción de los Centros del Valle del Software, una de las políticas bandera de la Alcaldía. Y luego de su renuncia, Quintero lo puso a sonar como miembro de la Junta Directiva de la Cámara de Comercio de Medellín, algo que finalmente no sucedió.
Arias llegó a la lista del Verde impulsado por el representante a la Cámara Elkin Ospina, de Antioquia. Dentro del fragmentado partido Verde paisa, Ospina representa una tercería al ala más de izquierda, liderada por el excongresista León Fredy Muñoz, hoy embajador de Nicaragua, y al ala más de centro encabezada por el concejal Daniel Duque, candidato oficial de los verdes a la Alcaldía de Medellín.
“Yo no estoy en el partido Verde para desquinterizarme. No niego que valoro al alcalde. Estoy agradecido por la oportunidad que me dio en su gobierno”, dice Arias, quien asegura que está apoyando a Duque, un férreo opositor a la administración.
El quinterismo puro
Son tres los candidatos fuertes de la lista de Independientes al Concejo de Medellín. Cada uno es cercano a personas del primer círculo de Quintero, o siguen teniendo influencia en la burocracia de la administración.
Por un lado está Ana María Valle, exsecretaria de Mujeres. Es la cabeza de lista. Su candidatura está impulsada por Diana Osorio, la poderosa esposa de Quintero, según dos fuentes de Independientes que pidieron la reserva de sus nombres.
Valle empezó su recorrido en la administración como asesora del despacho de Osorio. Luego estuvo en la construcción de la Secretaría de la No Violencia, la dependencia que lideró Upegui, de quien también es cercana. En esa cartera, fue subsecretaria de Construcción de Paz Territorial. Después saltó a la Secretaría de Mujeres. Renunció en junio del 2022 para sumarse a la campaña presidencial de Gustavo Petro, como entonces lo hicieron decenas de altos funcionarios de Quintero.
Recientemente, Valle ganó protagonismo por liderar una campaña contra la gentrificación en Medellín. Es sobrina del célebre abogado Jesús María Valle, asesinado en 1998 por orden de los paramilitares. Representa el ala más progresista de Independientes.
El segundo candidato fuerte de la lista de Independientes es Fernando Pulgarín, quien es cercano al suspendido senador Alex Flórez. “Yo valoro sus luchas estudiantiles, como la aprobación de la matrícula cero en Medellín. Coincidimos en lo político y lo programático”, le dijo Pulgarín a La Silla. “En lo personal, cada uno debe asumir sus responsabilidades”, dice a propósito de los problemas de alcoholismo que llevaron a Flórez a ser sancionado.
La relación entre Pulgarín y Flórez también se ha traducido en puestos. Como lo reveló El Colombiano, su pareja sentimental, Catalina Cano, ha trabajado como contratista en el Dagrd, la agencia de atención de riesgos de Medellín que ha sido señalada de ser un fortín burocrático al servicio de Flórez.
Pulgarín viene de ser edil de la comuna 4, Aranjuez, un sector al nororiente de la ciudad. Empezó su carrera política militando dentro del partido Verde, pero en los últimos años se integró al equipo del alcalde, siendo incluso contratista de la administración. Representa el sector del quinterismo más conectado con los barrios populares.
La última carta fuerte de Independientes es el actual concejal Carlos Romero, conocido como “El Mocho”. En 2021, fue director del Inder, el instituto de deportes de la Alcaldía de Medellín. Su gestión al frente de la entidad y la de su sucesor, Cristian Sánchez, han sido cuestionadas por los contratos interadministrativos celebrados con Metroparques, una entidad por medio de la cual grupos políticos aliados de Quintero se han visto favorecidos. De los tres, Romero es el único que cuenta con experiencia electoral en el Concejo.
Sin embargo, a pesar de ser la lista del alcalde y contar con acceso a la burocracia local, al interior de Independientes reconocen la dificultad de superar los resultados del 2019, cuando obtuvieron dos curules. “Lo más probable es que obtengamos una curul. Si acaso, dos”, le dijo a La Silla una fuente de Independientes que participó en la elaboración de la lista, y quien pidió la reserva de su nombre.
El quinterismo intenta paliar esa debilidad con sus conexiones en otras listas. De lograrlo, seguirá conservando una presencia considerable en la ciudad y podrá convertirse en otro resorte de la prematura candidatura presidencial de su jefe político.