A través de un comunicado, el Grupo Sura salió al paso a las versiones que han circulado en los últimos días sobre la supuesta decisión de vender su participación en el conglomerado de alimentos Nutresa, tras conocerse el acta de una sesión extraordinaria de la Junta Directiva de la empresa del 11 de noviembre apenas presidida por Andrés Bernal, Ángela María Tafur y Ximena Lombana.
Según la compañía, con esa asistencia a la reunión y tras la renuncia de Luis Javier Zuluaga, Sebastián Orejuela, Santiago Cuartas y Pablo Londoño a sus puestos dentro del órgano directivo, no hay quórum suficiente ni legal para tomar alguna determinación.
En la sesión a la que asistieron Bernal, Cuartas, Tafur y Lombana se tomó la decisión de aprobar la venta total de las acciones que la compañía tiene en el conglomerado de alimentos Nutresa y por la cual el grupo árabe IHC Holding había lanzado una OPA que se vence el próximo 18 de noviembre y pretende adquirir hasta un 31,2% de la participación.
Según consta en el acta del encuentro, la decisión de acceder a la oferta de los extranjeros cercanos a Gilinsky estuvo basada en el alto valor ofrecido en la misma en la cual Nutresa es valorada en más de 20 veces y sus utilidades y dividendos se multiplican hasta en 40 y 80 veces respectivamente.
Además, pensando en esos 2.200 millones de dólares que se recibirían por la transacción, los asistentes a la reunión indicaron que serviría para fortalecer la estrategia de la compañía en sus “negocios financieros, disminuir a largo plazo y reducir en forma significativa sus pasivos, en beneficio de la sociedad y todos sus accionistas”.
En el comunicado, Sura indicó que cualquier decisión que se tome debe contar con la presencia de mínimo cuatro de los siete miembros de la Junta y que por esta razón convocaron a una asamblea extraordinaria el próximo 22 de noviembre con el fin de elegir los nuevos integrantes.
«La manifestación de estos tres miembros de Junta no tiene validez toda vez que en una Junta Directiva de siete miembros, la mayoría requerida para deliberar y tomar decisiones es de mínimo cuatro Directores», específica la carta.
El eventual éxito en la transacción por parte del grupo árabe, supondría la caída del enroque empresarial de lo que se ha conocido como el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA), en el que hay participaciones cruzadas de Sura, Argos y Nutresa. Al acceder al control de más de la tercera parte de Nutresa, los árabes, junto al grupo Gilinsky permearían así los cimientos de la propiedad del grupo paisa.
«La manifestación de estos tres miembros de Junta no tiene validez toda vez que en una Junta Directiva de siete miembros, la mayoría requerida para deliberar y tomar decisiones es de mínimo cuatro Directores», específica la carta.
El eventual éxito en la transacción por parte del grupo árabe, supondría la caída del enroque empresarial de lo que se ha conocido como el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA), en el que hay participaciones cruzadas de Sura, Argos y Nutresa. Al acceder al control de más de la tercera parte de Nutresa, los árabes, junto al grupo Gilinsky permearían así los cimientos de la propiedad del grupo paisa.
Tomado de La FM