En medio de los homenajes para Marcelo Gallardo por su despedida, en el panorama de River Plate se asoma otro gran problema relacionado con el colombiano Juan Fernando Quintero, que vio la tarjeta roja en el final del partido ante Rosario Central por un empujón al árbitro Fernando Echenique.
De acuerdo con lo que se logra ver en el video, Quintero se enoja por un ‘manotazo’ de Echenique, segundos antes de reclamarle y, como último recurso, empujarlo con las dos manos en el pecho.
Por supuesto, el árbitro le mostró la tarjeta roja y eso, lejos de calmar a Juanfer, lo encendió más, al punto de que sus compañeros tuvieron que agarrarlo para impedir que el lío se hiciera más grande.
Pese a los reclamos, el colombiano tuvo que irse a las duchas por unos minutos, antes de regresar al acto de homenaje a Gallardo, en el que él era el encargado del discurso en nombre de todo el plantel. Quintero se olvidó de su furia por la expulsión y la cambió por las lágrimas, con las que le dio la despedida al hombre que le depositó la confianza para tomar una segunda oportunidad en el fútbol del exterior.
Le saldrá caro
Pero cuando el homenaje terminó, los momentos de tensión se hicieron virales en toda Argentina, mientras en los medios de comunicación empezaban a buscar el reglamento para ver qué tan grave podría ser la sanción en un caso de agresión directa al árbitro, hecho que no es muy común entre los profesionales.
De acuerdo a lo que reza el artículo 183 del Reglamento de Transgresiones y Penas de la Federación Argentina (AFA), el colombiano no solo enfrentará las fechas de sanción por la tarjeta roja directa, sino que se podría acarrear incluso más de 1 año de inactividad en el fútbol de ese país, aspecto que haría inminente su salida.
“Suspensión de uno a cinco años al jugador que agreda al árbitro aplicándole golpe por cualquier medio, o lo derribe, embista, empuje, dé empellones o zamarree violentamente con propósitos de agresión. Si las lesiones llegan a ser graves, la sanción de suspensión puede llegar a diez años, o hasta expulsión de la AFA”, reza el artículo al que se ajusta lo visto en la transmisión oficial.
Bajo esa norma, todo dependerá de lo que mencione el árbitro Echenique en el informe arbitral. Quintero solo se salvará si el juez explica que se trató de un “agravio menor”, es decir, que no hubo un intento de violencia por parte del futbolista.
De cualquier modo, la situación ya se encuentra en manos del comité disciplinario, que llamará a Juanfer para dar su versión de los hechos, en la que seguramente incluirá el ‘manotazo’ previo del juez central como argumento de defensa.
Sea cual sea la decisión de la AFA, los caminos del ‘10′ parecen estar apuntando a otros horizontes, pues la salida de Gallardo disminuye las posibilidades de una renovación que solo se dará si el jugador y el club llegan a un acuerdo para la compra del pase.
Hace unos días, antes de esta reprochable reacción, el representante de Quintero había dejado claro su deseo de sentarse a negociar, pero las circunstancias ahora son distintas y eso puede provocar que la historia del antioqueño y la banda cruzada llegue a su final. Lo cierto es que opciones no le faltan, pues hace rato se viene rumorando sobre un interés desde Brasil, del que ahora pueden empezar a hablar, teniendo en cuenta que el colombiano se perderá el último partido de la temporada y luego de eso saldrá disfrutar de sus vacaciones ante el parón del fútbol argentino por el Mundial.
Tomado de Semana