Comunidades de la zona rural de Cartagena de Chairá, en Caquetá, denunciaron que en diferentes ocasiones, un grupo de personas armadas, que se identifican como “los de Sinaloa”, estarían reclutando menores de edad en las veredas del municipio.
Según la denuncia hecha por la Coordinadora Departamental de Organizaciones Sociales, Ambientales y Campesinas del Caquetá (Coordosac), la situación se empezó a presentar el 22 de agosto, cuando un grupo de aproximadamente 10 personas llegaron hasta el caño “Las Ilusiones”, donde se encontraban varios menores de edad pescando, para ofrecerles dinero, vehículos e incluso, con actos violentos, insisten en reclutarlos.
“Son aproximadamente diez personas con armas largas tipo fusil, embotadas, encapuchadas, con pantalones camuflados, buzos negros, intimidando con su presencia a la comunidad y preguntan por dueños de fincas y dirigentes comunales. La acción de reclutamiento forzado, junto a advertencias de tomarse la región y ajusticiar a las personas, la repiten en varias oportunidades los siguientes días”, dice la denuncia.
Ante esta situación, la comunidad elevó la petición a la Personería y Defensoría del Pueblo, y con el apoyo de 300 personas del municipio, crearon una comisión humanitaria para ir hasta los lugares donde se han registrado los hechos, con el fin de obtener mayor información.
“Cerca a la vereda La Reforma, del grupo de las personas armadas que encontró la comisión humanitaria, uno de ellos se identifica como Cabo Primero José Carrillo, comandante del grupo perteneciente al Bato 1 del Ejército Nacional, manifestando que anda “en una misión especial algo diferente, por eso ustedes nos ven así” y que por ende andan sin distintivo, que para cualquier información se pueden dirigir a un tal mayor Turriago”, agregan.
Según Coordosac, durante los días en los que se registraron estos hechos, la comunidad reportó fuerte presencia del Ejército en el sector de La Reforma, Las Piscinas y Villalobos, el mismo donde ha estado el grupo que está intimidando a las comunidades. En vista de la situación, la comisión se comunicó con el cabo Romero, quien les dijo que no tiene conocimiento de las tropas militares en ese sector.