En la reforma tributaria que radicó el Gobierno del presidente Gustavo Petro se busca acabar con el impuesto del 4 × 1000, que recordamos, consiste en descontar 4 pesos por cada 1000 pesos de la transacción, ya sea un retiro, un traslado, un pago y dependiendo si es de una cuenta bancaria corriente o de ahorros.
El proyecto advierte en su artículo 64 que este impuesto se acabaría para quienes hagan movimientos menores a $13,3 millones al mes.
Recordemos que ya existe una exención para una sola cuenta bancaria marcada. Pero si esto se aprueba los bancos deberán consolidar información entre ellos para que la exención aplique sin necesidad de marcar la cuenta.
Cabe mencionar que este es un impuesto, no es un descuento que realiza la entidad bancaria por sus productos o servicios, por ello los bancos no obtienen ninguna ganancia de este gravamen, dado que deben entregarlo totalmente al Gobierno Nacional.