La entidad exhortó a las autoridades de orden departamental y nacional para instalar medidas de protección para las comunidades
La Defensoría del Pueblo, liderada por Carlos Camargo, dio a conocer que el paro armado del ELN, que se dio entre el 23 y 26 de febrero, agravó los casos de desplazamiento forzado en ese mes, específicamente en las comunidades de Arauca, Chocó, Putumayo, entre otras.
Los hechos más graves, según informó la entidad, sucedieron en Chocó, en los municipios de Istmina y Sipí. Allí, 365 personas fueron desplazadas. En Cauca también hubo un desplazamiento masivo, repartidos en los municipios de Suárez y Argelia, con 192 y 89 personas, respectivamente.
Si se observa el confinamiento presentado durante el paro armado, es posible evidenciar que en Buenaventura hay 8.000 personas en esta situación, mientras que en Bojayá esta situación afectó a 3.700 personas.
Por tal motivo, la Defensoría del Pueblo instó a las autoridades departamentales y nacionales a tomar medidas urgentes con el fin de proteger a las comunidades en peligro.