En compañía del ministro de Hacienda, José Manuel Restrepo, el presidente Iván Duque sancionó la Ley de Inversión Social con la que se busca recaudar 15,2 billones de pesos para la atención de los más vulnerables, la reactivación económica y la estabilidad de las finanzas públicas.
“Fue un camino largo, pero necesario para conseguir la aprobación de esta, la más ambiciosa en cuanto a lo social de los años recientes. Respondiendo a los retos y necesidades que tenemos en varios frentes como lo es la pobreza, el desempleo, la reactivación y en unas finanzas públicas sanas”, señaló el ministro.
Esta se obtuvo a través de un consenso con jóvenes, líderes sociales, empresarios, el sector financiero y partidos políticos, entre otros, después de la ola de protestas que creó la anterior reforma tributaria que presentó el exministro y hoy codirector del Banco de la República, Alberto Carrasquilla, y que le ponía impuestos a la clase media.
En esta ocasión, el 69 por ciento de los recursos vendrá del sector empresarial y otro 31 por ciento lo pondrá el Gobierno a través de un apretón al gasto público y del control a la evasión.
Con estos ingresos, se buscará atender a los más vulnerables a través de todo un paquete social en el que se ampliará el Ingreso Solidario hasta diciembre del 2022. En total, con se beneficiarán 4,1 millones de hogares, equivalentes a 14,3 millones de personas.
Además, el subsidio a la nómina irá hasta diciembre de este año, se le dará un plus adicional a los empresarios que se vieron afectados por el paro y habrá subsidios para las empresas que contraten a jóvenes o a mujeres.
Igualmente, la matrícula cero quedará ya como una política de Estado, se ofrecerán alivios tanto a las personas naturales como a las empresas y se extendrán los beneficios al turismo.
“Que importante ha sido generar acuerdos en las fuentes que financiarán estos propósitos, que en su mayoría son recursos permanentes, a través de un esfuerzo de austeridad en el gasto público, profundizar los avances en lucha contra la evasión y el compromiso del sector empresarial con el aporte que harán a través de la renta y el ICA”, expresó el titular de la cartera de Hacienda.
Con todo ello, se buscará que las metas de pobreza vuelvan a niveles prepandemia. Se proyecta que el impacto de la iniciativa reducirá los niveles de la extrema de 15,1 por ciento en 2020 a 6,7 por ciento en 2022. También disminuirán los niveles de pobreza moderada de 42,5 por ciento en 2020 a 34,3 por ciento en 2022.